Off the record | El Nuevo Siglo
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Viernes, 8 de Febrero de 2019
Redacción Política

Ejemplo mundial

 

La decisión de la Corte Constitucional de prohibir la caza deportiva en Colombia pone a la legislación nacional como una de las más avanzadas en materia animalista, no solo en el continente sino a nivel mundial. Incluso, según lo admitieron ayer varios de los expertos que analizaron el fallo del máximo tribunal en Colombia, ya nuestro país es tomado como referencia de los movimientos animalistas alrededor del globo, sobre todo por la estructurada tesis de la Corte de los animales como “seres sintientes”, que incluso ya es analizada por magistrados de otras latitudes. Sin embargo, esos mismos expertos indicaron que esta jurisprudencia de la Corte no afectará, al menos en el corto y medianos plazos, la postura del alto Tribunal en torno a que la actividad taurina es permitida en las ciudades en donde es una tradición histórica y cultural comprobada. Claro, a menos que el Congreso determine lo contrario.

 

No hay tal…

 

Una alta fuente de la Jurisdicción Especial de Paz (JEP) les indicó a varios periodistas que hay algunos sectores del país interesados en sobredimensionar las diferencias de criterios y choques de competencia -que dijo son “normales en el arranque de una jurisdicción excepcional frente a la ordinaria”- con la Fiscalía y la Corte Suprema de Justicia. Agregó la fuente que, a un año de activada la JEP, las decisiones que ha tomado la Corte Constitucional sobre qué le corresponde asumir a la justicia ordinaria y qué a la jurisdicción especial, han permitido en poco tiempo construir un “mapa de competencias” con límites y facultades cada vez más definidos y referenciables. Incluso consideró que el caso ‘Santrich’, por más revuelo que tenga a su alrededor, es la prueba más fehaciente de cómo las líneas jurisdiccionales ya están muy clarificadas.

 

Cero y van tres…

 

“…Hay que traer un esquimal”. Esa fue la respuesta que un alto dirigente del Centro Democrático le dio a un periodista de EL NUEVO SIGLO en torno al lío en que se ha convertido para el gobierno Duque la designación del director del Centro de Memoria Histórica. Al último candidato Rubén Darío Acevedo le han surgido múltiples críticas desde sectores de izquierda debido a unos trinos suyos en donde cuestiona a dirigentes de este sector político y unas columnas en donde analiza si existe o no conflicto armado en Colombia. Los dos anteriores nombres que estuvieron a punto de llegar al mismo cargo, Mario Javier Pacheco y Vicente Torrijos, también recibieron críticas por sus posturas ideológicas e incluso el segundo por un problema en la acreditación de un título académico. Según la fuente uribista, para que la izquierda no replique habrá que traer a alguien del polo ártico, “un esquimal” que nunca haya hablado, opinado ni tuiteado sobre Colombia.

 

Coletazo electoral

 

La crisis generada alrededor del proyecto de Hidroituango, que ayer tenía al borde de la emergencia ambiental a la región ubicada río Cauca abajo, por la disminución drástica de su caudal, tendrá un coletazo electoral a corto plazo. Según se dice en los corrillos políticos de Medellín, es claro que los candidatos a la Alcaldía paisa y la Gobernación antioqueña han empezado a politizar esta crisis y sus distintas derivaciones, a sabiendas que será un asunto gravitante en la campaña proselitista que está iniciando. Se dice, incluso, que se está ahondando en la gestión que tuvo Sergio Fajardo como mandatario capitalino y departamental en este tema del proyecto hidroeléctrico, con el fin de utilizarlo como ‘arma’ política en medio de una campaña que será particularmente álgida en territorio paisa.