Lentamente el país comienza a tener mayor actividad, debido a la reapertura de algunos subsectores de la construcción y las manufacturas. Sin embargo, la falta de claridad en los protocolos ha demorado la operación de muchas empresas y trabajadores

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El reinicio de las operaciones en sectores de la construcción y las manufacturas, a partir del pasado 27 de abril, fue como se esperaba: a cuentagotas. El mensaje confuso de las autoridades sobre las condiciones de funcionamiento tanto desde las empresas como en sus trabajadores, fue el principal problema para que la actividad económica del país recobrara en algo su impulso para dar paso a una recuperación total, una vez culmine el proceso de cuarentena ordenado por el Gobierno.

El ministro de Comercio, José Manuel Restrepo, dijo a EL NUEVO SIGLO, que “hasta el jueves último que se recogió información de los 19 departamentos y las ciudades, que tienen entre el 76% y 86% de la industria colombiana, del total de empresas que es de 86.000 manufactureras, el número de autorización es del 22%; es decir, 16.664 donde sobresalen Medellín con 8.250, Bogotá, Cali, Bucaramanga, Cali, Cúcuta y Barranquilla”.

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Sostuvo que “el número de empresas que han sido validada en sus  protocolos son 3.840, es decir, cerca de 4.000 empresas, varias de ellas están en procesos pedagógicos y otras pudieron arrancar su proceso de producción. Algunas ciudades han tomado la decisión que la industria arranque luego, pero lo están haciendo para que no se cope el 35% del transporte masivo. Pero todo va en marcha con el criterio de gradualidad y cumplimiento de la bioseguridad”.

De acuerdo con cifras extraoficiales, pero que surgen de constructoras y empresas manufactureras, cerca de 1  millón de trabajadores salieron por primera vez de su confinamiento obligado en las casas para empezar a trabajar.

Para el sector de la construcción salieron alrededor de 200.000 personas y en el de manufacturas 800.000, en todo el país. Medellín fue la ciudad donde más se notó la presencia de trabajadores, según el alcalde Daniel Quintero, cerca de 50.000 personas comenzaron a trabajar desde el lunes pasado.

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De acuerdo con la presidenta de Camacol, Sandra Forero, el proceso de reactivación comenzó de una forma ordenada, cumpliendo con los estándares que exigen los protocolos tanto de sanidad como de seguridad, a su vez, es un proceso gradual y ordenado, en el 90% de los municipios donde hay obras.

Una de las mayores complicaciones que han tenido las empresas es en la generación de registros para poder trabajar. En Bogotá, por ejemplo, solo entraron a operar 26 empresas privadas de construcción que contaban con la autorización de la Alcaldía de Bogotá.

Ya han sido aprobadas otras 126 obras de edificaciones, sumando en total 152 que pueden operar a partir de la otra semana en la Capital, con lo que podrán trabajar entre 2.500 y 3.000 personas.

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En el país

En Antioquia, cerca de 30.000 empresas y casi 400.000 personas se inscribieron para solicitar el permiso de trabajo y movilidad. En Cundinamarca, al menos 141 puntos de manufactura iniciaron de manera gradual. “Entre parques industriales, centros empresariales y plantas, esos 141 puntos pueden llegar a casi 1.000 empresas”, aseguró Nicolás García, gobernador de Cundinamarca.

Entre tanto, en Bucaramanga, empresarios del calzado no reanudaron sus labores pues señalan que no les alcanza el dinero para pagar la mano de obra. 

Por su parte, el sector de la construcción también acató las normas de bioseguridad. En Barranquilla los constructores de varios proyectos inmobiliarios empezaron sus protocolos de trabajo.

Según Jorge Segebre, director de Camacol Atlántico, en su gremio esperan “que entre el 4 y el 11 de mayo estemos en el 100% de las obras”.

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Infraestructura

En cuanto a obras civiles, se reactivaron las del corredor Anapoima-Mosquera, en Cundinamarca, con 421 empleados, “con esto se busca beneficiar al sector agroindustrial, comercial y turístico de servicios comunes, y a más de 145.000 pobladores”, indicó Guillermo Toro, director técnico del Invías.

Asimismo, en Cali, después de 34 días de aislamiento obligatorio, se reiniciaron labores en construcción y manufactura.

En todo el país y cerca de las construcciones, así como en algunas industrias se nota mayor presencia de vendedores de alimentos y tinto.

En la construcción de edificaciones, el presidente de la constructora Amarilo, Roberto Moreno, dijo que “hemos avanzado mucho en el proceso de implementación del protocolo de bioseguridad; en muchas de las obras hemos ya logrado cumplir con todos los lineamientos y las estamos reactivando. Nuestro compromiso es llevar a cabo un proceso gradual y escalonado, priorizando el cuidado de la salud de nuestros colaboradores, sus familias y los colombianos. Nuestro compromiso es continuar construyendo los sueños de los colombianos”.

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Sin embargo, en el sector de infraestructura ya son varios los proyectos que están ejecutándose. Uno de ellos es el túnel de La Línea. De tal forma que, el Instituto Nacional de Vías (Invías) reveló que reinició labores en el Cruce de la Cordillera Central, cumpliendo con los protocolos de bioseguridad.

En estas obras trabajan al menos 3.000 personas.  Por otro lado, la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) informó que en Antioquia y el Eje Cafetero, una docena de proyectos de cuarta generación reiniciaron las obras mediante 150 frentes de trabajo. Entre las principales obras están la Autopista al Mar 1, que conecta a Medellín con el túnel del Toyo, en el occidente antioqueño, y que avanza en la construcción del segundo tubo del túnel de Occidente, con 4,6 kilómetros, cuyo avance es del 75%.

Asimismo, en Santander se reiniciaron obras en la vía entre Bucaramanga y Barrancabermeja, y el corredor que conectará a Santander con Cúcuta,  indicó Jaime René Rodríguez, secretario de Infraestructura de Santander.

Mientras tanto, en Barranquilla se mantienen los trabajos de modernización y ampliación del aeropuerto Ernesto Cortissoz, además de las obras de terminación de la circunvalar de la Prosperidad, corredor de carga que conecta a Barranquilla con Malambo, que cuenta con más de 95% de avance.
De otro lado, en Cali existen 32 contratos de obras, de los cuales 14 se van a reiniciar con las medidas de prevención necesarias. Así lo señaló el secretario de Infraestructura de la ciudad, Juan Diego Flórez, al recalcar que en ese paquete están las denominadas ‘obras del sur’, con las cuales se busca desembotellar la salida hacia Jamundí.

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Manufacturas

Referente a las  manufacturas, algunos sectores como el textil, reiniciaron su actividad bajo un estricto protocolo de seguridad.

En concreto, aquellos que mostraron un reinicio en sus operaciones fueron fabricación de productos textiles, confección de prendas de vestir, curtido y recurtido de cueros, fabricación de calzado, fabricación de artículos de viaje, maltas, bolsos de mano, artículos similares, así como la fabricación de artículos de talabartería y guarnicionería.

También, la industria de la madera y corcho, excepto muebles, así como la de metales, química y fabricación de maquinaria, aparatos y equipos electrónicos volvieron a operar, pero en menor escala

En manufacturas, la gerente de Bosi, Clemencia Vélez, explicó que ellos ya están listos para empezar a operar a partir de la otra semana ya que en esta no lo pudieron hacer por los registros. Para Vélez, la recuperación del sector tomaría tiempo, dado que para empresas como Bosi, que tienen más de 150 tiendas, la apertura de los centros comerciales es un factor muy importante. Según la directiva, por más de que se tripliquen las ventas a través de la tienda virtual, esto solo aportaría un monto cercano a lo que harían con cinco tiendas físicas.

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