Inflación del primer semestre dobló la registrada en 2020 | El Nuevo Siglo
EL PRECIO de los alimentos bajó en junio ante los fuertes incrementos de mayo, debido a los bloqueos de vías. /ENS
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Domingo, 4 de Julio de 2021
Redacción Economía

Tras el resultado de junio cuando se registró una inflación de -0,05%, luego del levantamiento de los bloqueos, al cierre del primer semestre del año el indicador mostró una variación año corrido de 3,13%, más del doble que la que tenía en 2020 (1,12%), en tanto que la variación anual del Índice de Precios al Consumidor (IPC) se ubicó en 3,63%, por encima del 2,19% de hace un año.

El director del DANE, Juan Daniel Oviedo, explicó que, si bien los efectos inflacionarios derivados del desabastecimiento causado por los bloqueos y el paro cedieron durante junio, principalmente por los precios de los alimentos que se consumen en el hogar, aún persiste un efecto inflacionario en las comidas en restaurantes, producto de los costos de las proteínas (pollos, huevos y carne de res principalmente).

Reportó la entidad que mientras que la inflación de alimentos tuvo en junio de 2021 un resultado negativo de -1,02% debido a que bajaron los precios de las verduras como el tomate, la cebolla y las frutas frescas, el IPC de restaurantes y hoteles tuvo un aumento del 0,68% en el sexto mes del año.

Este comportamiento se debe a que los rezagos del desabastecimiento y la reducción en la producción afectan desde el costo del llamado corrientazo, hasta el del pollo asado y las hamburguesas, que tienen alta demanda.

Por su parte, la inflación de bienes y servicios diversos subió en el mes 0,27%, los precios de los servicios de información y comunicaciones bajaron en junio 0,27% debido a que se mantienen las promociones, en tanto que el IPC de los muebles y artículos para el hogar subió 0,35% durante junio.



Otros productos

A su turno, los precios de las prendas de vestir y el calzado subieron 0,02 por ciento, los del rubro de recreación y cultura aumentaron 0,05 por ciento, los de la salud un 0,23 por ciento y los de las bebidas alcohólicas y tabaco se incrementaron un 0,24 por ciento.

Según el DANE, la inflación relacionada con los gastos de vivienda (alojamiento, agua, electricidad y gas) aumentaron en junio un 0,06 por ciento.

De igual forma expertos aseguran que aunque ya se levantaron los bloqueos que llevaron a un desabastecimiento en algunas ciudades del país, que a su vez ocasionaron un incremento de los alimentos, hay otros escenarios que están empujando al alza los datos de la inflación anual.

Uno de ellos, por ejemplo, son los altos precios al consumidor que está registrando Estados Unidos, que también está viendo números récord. Y todo lo que ocurra con ese país puede impactar en otros como Colombia.

Bienes

Según un análisis de Itaú, otro de los aspectos que llevarían a ese aumento generalizado de los precios en este segundo semestre, son “los vehículos nuevos y las piezas de automóviles, afectados por la debilidad de la moneda colombiana. La división de hoteles y restaurantes también apoyaría la subida mensual en medio de la reactivación económica y el aumento de los precios de los alimentos”.

Precisamente, los analistas apuntan a que un mayor dinamismo de la economía luego de una recesión como la que se vivió en 2020 también llevaría a un aumento de los precios de algunos productos que tienen una mayor demanda.

Ante esta situación, desde Bancolombia proyectan una cifra anual de 3,58% estimando riesgos al alza para el resto del 2021.

“Este avance estaría explicado en buena medida por el efecto de una baja base de comparación, generada por la moderación de los precios al inicio de la pandemia. Tal lectura estaría apoyada en una desaceleración de la inflación anual de los alimentos, que pasaría de 9,52% a 8,16%, y un avance en el componente básico, desde 2,10% a 2,66% anual”, dijo Juan Pablo Espinosa, director de investigaciones económicas de Bancolombia.

Previsiones

Mientras tanto, Juan David Ballén, director de análisis de Casa de Bolsa, sostuvo que “la cifra llegaría a subir a 3,70% y, hablando de expectativas para el cierre del año, estaría entre 3,6% y 4%, cerca del rango meta que tiene el Banco de la República”.

Por su parte, María Paula Castañeda, economista de BBVA Research para Colombia, se refirió a otros factores como la normalización de algunas tarifas educativas y de servicios públicos, así como el incremento en el costo de comercio internacional y las materias primas, que podrían generar presiones alcistas en la inflación en lo que resta del año, llevándola a ubicarse por encima de la meta esperada por el Emisor.

“En el corto plazo, estamos viendo una presión al alza en el grupo de alimentos proveniente de los bloqueos generados por el paro nacional. Esperamos que este efecto sea, en su mayoría, transitorio y se diluya en los próximos meses”, dijo Castañeda.



Disminuyen precios de frutas y verduras

En la última semana de junio, se redujeron los precios de la cebolla cabezona blanca en 26 de los 31 mercados donde se vendió. Este comportamiento se debió al alto volumen de producto ingresado desde Tunja, Sáchica, Sogamoso, Cucaita, Samacá (Boyacá), Marinilla, La Unión (Antioquia), Cota, Une, Cáqueza, Ubaque, Quetame, Fosca (Cundinamarca), Iles y Funes (Nariño). En Tunja y Arauca, por ejemplo, el kilo se vendió a $342 y a $670, respectivamente, 23,06% en promedio menos.

En el caso del ajo importado, por ejemplo, el descenso estuvo motivado por el ingreso de producto proveniente desde China, el cual había sido afectado por los bloqueos viales realizados en el marco del paro nacional. Esta situación se registró en 24 de los 27 mercados donde se comercializó. En Popayán y Cúcuta la caída superó el 10,00%, ofreciéndose el kilo a $8.038 y a $9.000, respectivamente.

Durante esta semana se incrementaron los precios del maracuyá en 29 de los 31 mercados donde se ofreció. Esta tendencia obedeció a la menor producción en Andalucía, Tuluá, Caicedonia, Alcalá, La Unión (Valle del Cauca), El Peñol (Nariño), Girón, Lebrija, Los Santos (Santander), La Tebaida (Quindío), Chinchiná, Manizales (Caldas), Chigorodó (Antioquia), Saravena, Tame (Arauca), Lejanías, Granada y San Martín (Meta). En Tunja y Cúcuta el aumento fue en promedio del 44,29% y se transó el kilo a $3.442 y a $3.448, respectivamente.

Para el caso del tomate de árbol, sus cotizaciones registraron un alza en 34 de los 47 mercados donde se cotizó, como resultado de la baja disponibilidad procedente de Santa Rosa de Osos, Don Matías, Marinilla, Guarne, El Santuario, Yarumal, La Unión, Sonsón, La Ceja (Antioquia), Samaniego, Santacruz (Nariño), Pamplona (Norte de Santander), Sotaquirá, Ciénega, Ramiriquí, Jenesano y Tibaná (Boyacá). En Santa Helena en Cali, por ejemplo, el precio subió 15,48% y se cotizó el kilo a $2.700.

Asimismo, durante el transcurso de la semana cayeron los precios de la arracacha amarilla en 14 de los 21 mercados donde se comercializó. Esta tendencia se debió al aumento de las actividades de recolección en los municipios de Chitagá, Mutiscua, Pamplona, Cucutilla (Norte de Santander), Cajamarca, Ibagué (Tolima), Tibaná, Tunja (Boyacá) y Carmen de Carupa (Cundinamarca). En Ibagué y Bogotá la disminución fue en promedio del 10,81% y se vendió el kilo a $561 y a $727, respectivamente.

En el caso del plátano hartón maduro, sus cotizaciones disminuyeron en 8 de los 10 mercados donde se comercializó, como resultado del aumento de la carga ingresada desde Líbano (Tolima), Belén de Umbría, Quinchía (Risaralda), Andes, Jardín (Antioquia), La Merced (Caldas), Armenia (Quindío), Lejanías, Granada, San Martín (Meta), Saravena y Tame en (Arauca). En Bogotá y Cúcuta la cotización descendió en promedio 9,95% y se cotizó el kilo a $1.252 y $1.083, respectivamente.